¿Por qué no es bueno llevar a nuestra mascota a todos los sitios que visitamos?

A veces llevamos a nuestros perros al trabajo, al súper, a cafeterías, de vacaciones, etcétera, como si fuera una necesidad ¿Pero qué tan bueno es esto para nuestros amigos caninos y cómo impacta en su salud diaria? Te recomendamos algunos tips para que no lleves a tu perro a todos lados.

Por:

José Banco

No todos los lugares son pet friendly, si te acostumbras a llevar a tu perro a todos lados, habrás notado que no todos los espacios admiten animales. Por esta circunstancia, a veces tendrás que adaptarte y no será de lo más cómodo para ambos. Creemos juntos una lista de lugares a los que definitivamente no puedes llevarlo. Aquí lo que debes tener en cuenta:

· Restaurantes: muchos espacios permiten el acceso con mascotas, como cafés, bares o lugares públicos. Sin embargo, incluso en los lugares donde sí los permiten habrá restricciones para acomodar a toda la manada, especialmente a los perros más grandes. También debes considerar que no es conveniente llevar a tu perro a un lugar público si no puedes controlarlo, pues esto podría significar que nadie disfrute del momento.

· Viajes: algunas ocasiones, ni los más lujosos hoteles pet friendly del mundo están diseñados para acomodar perros fuera o dentro de la habitación. Las áreas de la piscina a menudo carecen de una cerca para mantener a las mascotas seguras y las instalaciones del gimnasio tienden a prohibir a los huéspedes no humanos. Si te gusta llevar a tu perro a todos lados, vale la pena investigar previamente las veterinarias ubicadas cerca del destino que estás por visitar, por si hay una emergencia.

Hay que tener en cuenta que existen personas que no toleran a los perros

Puede ser por miedo, alergias entre otras cosas, por lo que sea cual sea la razón, es importante respetar el espacio de todos. Como tip, si sueles llevar a tu perro a todos lados notarás que algunas personas no habituadas a ellos podrían sobrellevar mejor la situación si, antes de imponerles la presencia canina, les preguntas si no les molestaría que nos acercásemos a ellos en compañía de nuestra mascota.

Además, se puede estresar, si llevas a tu perro y notas alguno de estos signos de estrés, vuelve con él a casa, o al menos dale un descanso de toda actividad: relamerse la nariz o los labios; caminatas repetitivas o temblores; quejidos, ladridos o aullidos; orejas tiradas o clavadas hacia atrás; cola metida; actitud nerviosa; jadeos; diarrea; te evita o se aleja; se esconde o se oculta.

Cosas por las que hay que estar alertas al salir a pasear

Riesgo de sobrecalentamiento: los perros se enfrían de forma diferente a los humanos y pueden sucumbir rápidamente a las altas temperaturas. Trata de evitar salir a pasear durante las horas más calurosas del día. Un consejo profesional es que si el pavimento está demasiado caliente para tu propio tacto, entonces está demasiado caliente para las patas de tu perro. Cuando haga más calor, asegúrate de llevar mucha agua e intenta caminar bajo la sombra lo más posible. Debe tenerse especial cuidado con los perros braquicéfalos (de hocico corto), como los dogos y los bulldogs franceses, ya que les resulta más difícil controlar su propia temperatura corporal y, por tanto, son más susceptibles de sufrir un golpe de calor.

Perros con sobrepeso o de edad avanzada: los paseos son buenos en estos casos, pero deben hacerse con moderación y adaptarse a su capacidad. Si tienes alguna duda sobre cuánto es demasiado, conversa con tu veterinario. No empieces con desafíos caninos intensivos, más bien comienza con paseos suaves y lentos, y ve aumentando gradualmente la distancia y la dificultad a medida que se sientan cómodos con cada etapa. Los problemas articulares también pueden ser un riesgo común para los perros con sobrepeso o de edad avanzada, así que hay que asegurarse de alimentarlos con una dieta que favorezca las articulaciones o el peso.

Riesgo de que coman cosas que no deberían: nuestros perros son rápidos, y sus narices lo son aún más, nunca se sabe lo que hay debajo de unos arbustos, en las alcantarillas o a la vuelta de la esquina. Especialmente cuando paseen sin correa, supervisa a tu perro para asegurarte de que no se coma nada que le resulte perjudicial (ya sea tóxico o que pueda provocarle una obstrucción). Las cosas en el parque, en la basura o la comida que dejan otras personas pueden ser peligrosas para los perros. Cosas sencillas como el chocolate, las pasas o las uvas son alimentos habituales en los picnics, pero muy peligrosos para los perros. Las playas también suponen un problema con las medusas, los animales muertos y los temidos anzuelos. Como los senderos para perros y las playas suelen estar más alejados, puede ser difícil encontrar un veterinario cercano si algo sale mal.

Alimentación

¿Recuerdas que tus padres te decían que esperases 30 minutos antes de ir a nadar después de comer? Asegúrate de que también le des a tu perro tiempo para digerir sus alimentos. Es recomendable no darle una comida abundante inmediatamente antes o después del ejercicio. En algunos casos, esto puede provocar problemas médicos como hinchazón, entre otros. Salir a pasear con tu perro es una actividad estupenda para que ambos se mantengan en forma y sanos, tanto mental como físicamente. Sal al exterior y disfruta de este tiempo juntos.