Ridley Scott confiesa que no leyó absolutamente nada sobre Napoleón para hacer su película

Ridley Scott responde a las críticas sobre el rigor histórico de ‘Gladiator 2′ y su enfoque en Napoleón.

Ridley Scott parece destinado a generar controversia cada vez que estrena una nueva película. Si bien Gladiator 2 ha sido objeto de críticas recientes por su falta de rigor histórico, ahora vuelve al centro del debate, esta vez por sus declaraciones sobre Napoleón.

El propio director ha reavivado la polémica al admitir, en una entrevista con Vulture, que no había leído nada sobre la historia de Napoleón Bonaparte antes de rodar la película. “Hay más de 10.000 libros sobre Napoleón y todos mezclan hechos reales con conjeturas. Dejé la lectura al pobre bastardo encargado del guion”, comentó Scott en tono jocoso, refiriéndose al escritor David Scarpa.

El cineasta, lejos de justificar su falta de documentación personal, defiende su enfoque señalando que la historia está llena de interpretaciones. “Todo el mundo tiene una opinión sobre lo que ocurrió, así que siempre me pregunto: ¿alguien estuvo allí?”, agregó.

Estas declaraciones, lejos de apaciguar las críticas, han intensificado el debate sobre hasta qué punto el cine histórico puede tomarse licencias narrativas a favor del espectáculo, dice Ridley Scott.

¿Las quejas? En la batalla de Austerlitz

La recreación de este momento histórico clave fue uno de los mayores desafíos de Napoleón, tanto por su relevancia en la trama como por la complejidad de llevarlo a la pantalla.

Según Ridley Scott, la batalla original se enfrentó a cerca de 68.000 soldados franceses contra aproximadamente 90.000 tropas austro-rusas, una magnitud imposible de replicar en el rodaje debido a limitaciones logísticas. Para abordar esta dificultad, el equipo optó por combinar actuaciones humanas con tecnología avanzada, utilizando 400 extras y un centenar de caballos en el rodaje inicial, complementados con efectos CGI que permitieron dar vida al impresionante campo de batalla.

Scott destacó la dedicación de los extras, quienes tuvieron un papel crucial en la autenticidad de las escenas. “El trabajo de los extras fue fantástico”, afirmó el cineasta, subrayando cómo estas actuaciones, combinadas con la magia digital, lograron capturar la escalada y el dramatismo de uno de los episodios más emblemáticos de la carrera militar de Napoleón.

Gladiator 2 salva a Scott

La película, que está generando buenas sensaciones para los fans, está ayudando a “limpiar la imagen” del director, que viene de sendos fracasos con Napoleón, pero también con The Last Duel, que fue una de las caídas más sonadas del director en el pasado.

Ahora, con Gladiator 2 y Gladiator 3 en camino, parece que el director vuelve a enderezar el rumbo en su filmografía, ¿Qué podremos esperar del director próximamente?