La oscura anécdota de Sean Combs y su ritual en Central Park

El guardaespaldas de P. Diddy recordó una situación incómoda en 1999. ¿Por qué el rapero decidió recurrir a las artes oscuras?

El nombre de Sean Combs (55) no deja de sonar cerca de aquellos comportamientos escabrosos de índole sexual por los que será juzgado en mayo. Sin embargo, un nuevo testimonio de su entorno ha revelado una conducta inesperada y tétrica del rapero: hablamos de los rituales satánicos que Diddy realizó para “asegurar a sus protegidos”.

La anécdota de un guardaespaldas

La revista Rolling Stone ha podido acceder a un preestreno de un documental dedicado a Shyne Barrow, político y rapero que empezó su carrera como un “protegido” de Sean Combs. De acuerdo al guardaespaldas Gene Deal, cuando ambos hombres fueron enjuiciados en 2001 por posesión de armas e intento de soborno, Diddy decidió “asegurar su defensa” de una forma muy cuestionable.

El testimonio de Gene Deal asegura que Sean Combs realizó una breve parada a Central Park, horas antes de que se conociera el veredicto de Shyne. Dentro de aquel parque urbano de Nueva York, un hombre desconocido estaba esperando al Diddy. “Cuando él (Combs) se acercó al tipo, simplemente se arrodilló”, explicó con seriedad.

“Lo siguiente que vi fue humo yendo y viniendo alrededor de Diddy. Supongo que era incienso o algo así”. El guardaespaldas de Sean Combs logró identificar un objeto parecido a una biblia en las manos del desconocido, quien le pidió al rapero tomar un pájaro blanco de una jaula que había traído consigo. “Puff tomó este pájaro blanco y lo lanzó al aire, y el pájaro simplemente cayó al suelo, boom, como si fuera un ladrillo”.

¿Diddy está asociado al satanismo?

Es de esperar que la reacción de Gene Deal haya sido de un gran impacto. “Yo estaba como, ‘¡Oh, m****a!’. El pájaro murió. El pájaro ni siquiera se movió. (Sean) Combs simplemente se alejó de él muy rápido”. Más tarde ese día, Diddy fue absuelto de los cargos en su contra. El guardaespaldas recordó que el rapero mantenía una biblia en sus manos mientras el juez leía el veredicto.

Más allá de los vínculos entre Diddy y las prácticas satánicas, el caso judicial se convirtió en una pesadilla para Shyne Barrow. Mientras que su protector Sean Combs fue declarado inocente, el hombre de Belice fue condenado a diez años de prisión y deportado a su país tan pronto como abandonó la cárcel. Durante los años siguientes, Shyne acusó a Diddy de “haberlo utilizado de chivo expiatorio” para encubrir sus crímenes.-