La comedia que se encuentra en Max y catapultó a Jim Carrey a la fama

El talento cómico del actor en su versión más desenfrenada y caricaturesca.

En Hollywood, el ascenso al estrellato es a menudo un proceso lleno de altibajos, con actores que navegan entre éxitos y fracasos antes de alcanzar la cima. Pero hay momentos en que un actor rompe con esta norma, logrando una racha de éxitos que redefine su carrera.

Un ejemplo icónico de esto es Jim Carrey, quien en un solo año, logró protagonizar tres éxitos consecutivos que lo catapultaron a un nivel de fama que pocos han alcanzado.

Con películas como La máscara, Carrey no solo consolidó su lugar en la industria, también se convirtió en un icono real de la comedia.

¿De qué trata La Máscara?

En La máscara, Jim Carrey interpreta a Stanley Ipkiss, un hombre tímido y reprimido que suele dejar que los demás se aprovechen de él. Su vida parece estar llena de pequeñas humillaciones hasta que un día descubre una misteriosa máscara.

Esta máscara no es cualquier objeto, sino que está imbuida con el poder del dios nórdico Loki, conocido por su naturaleza traviesa y caótica. Cuando Stanley se pone la máscara, su vida cambia por completo: adquiere poderes inmensos y una personalidad desinhibida y alocada que lo lleva a vivir aventuras sorprendentes.

La película surgió en una época en la que Hollywood estaba explorando nuevas tendencias después del éxito de Batman de Tim Burton.

En lugar de centrarse en superhéroes tradicionales, comenzaron a aparecer películas con un estilo único, mezclando carisma, oscuridad y elementos del cine pulp con unos efectos especiales de lo más locos.

Que alguien le pare los pies

Pese a que después de esto, a Jim Carrey le golpeó la depresión por la pérdida de su esposa, y pese a que estuvo varios años fuera del radar, acabó regresando como el villano de Sonic, el Doctor Robotnik, devolviéndonos a sus fans a esos tiempos en los que nos echábamos las tardes de risa gracias a él.

Si nunca antes has visto La Máscara, espero que le des la oportunidad que se merece, porque es una película de lo más entretenida, y sí, loca, muy loca.