Fiebre del Nilo: ¿Cómo prevenir la enfermedad que transmite el mosquito?

El virus del Nilo Occidental causa una enfermedad viral y es transmitido por mosquitos. La afección puede ir de leve a grave.

Por:

José Banco

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El virus del Nilo Occidental causa una enfermedad viral y es transmitido por mosquitos. Fuente: Canva

La fiebre del virus del Nilo Occidental es una enfermedad transmitida principalmente por mosquitos infectados. Originaria de África, esta enfermedad se ha ido extendiendo por distintas partes del mundo debido al aumento de las temperaturas, incluyendo Europa y América. El virus es transmitido por mosquitos del género Culex, los mosquitos se infectan al picar aves que portan el virus y luego pueden transmitirlo a humanos y otros animales. La mayoría de las personas infectadas no presentan síntomas, pero en algunos casos, especialmente en personas mayores o con sistemas inmunitarios debilitados, puede causar enfermedades graves como encefalitis o meningitis.

¿Cómo prevenir la picadura?

Las autoridades y profesionales de la salud recomiendan utilizar repelentes. Fuente: Unsplash

Las autoridades y profesionales de la salud recomiendan algunos consejos a considerar para que estos insectos no estén cerca y reduzcas el riesgo de ser picado y en consecuencia, contraer la enfermedad. Una de las estrategias más efectivas es el uso de repelentes de insectos que contengan ingredientes activos como DEET, picaridina o aceite de eucaliptolimón. Estos productos deben aplicarse en todas las áreas expuestas de la piel y también sobre la ropa para una protección adicional.

Estos repelentes interfieren con los receptores olfativos de los mosquitos, dificultando que detecten el dióxido de carbono y otros compuestos que emiten los humanos y que les sirven de guía. El uso de insecticidas tanto en interiores como en exteriores también es una herramienta útil. En interiores, los aerosoles y dispositivos de vaporización pueden eliminar mosquitos que hayan ingresado al hogar. En exteriores, los insecticidas aplicados en arbustos y maleza donde los mosquitos descansan durante el día pueden reducir la población de estos insectos.

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Evita el agua estancada

Evita el agua estancada, ya sean lugares naturales o espacios cotidianos donde puedan reproducirse los mosquitos. Fuente: Unsplash

No hay nada mejor para los focos de reproducción que el agua estancada, ya que científicamente, los mosquitos hembras depositan sus huevos en el agua, y las larvas y pupas se desarrollan en este entorno antes de convertirse en adultos. El ciclo de vida de un mosquito puede completarse en tan solo una semana, lo que permite que incluso pequeñas cantidades de agua estancada, como las que se encuentran en platos de macetas, neumáticos viejos y canaletas obstruidas, se conviertan en criaderos eficientes.

Los repelentes interfieren con los receptores olfativos de los mosquitos, dificultando que detecten el dióxido de carbono y otros compuestos que emiten los humanos. Fuente: Unsplash

El agua estancada proporciona nutrientes y un estable entorno para los insectos en general. Las larvas se alimentan de microorganismos presentes en el agua y la falta de movimiento les ofrece una mejor oportunidad para sobrevivir y madurar. Por lo tanto, eliminar o cambiar regularmente el agua estancada interrumpe este ciclo de vida, reduciendo la población de mosquitos y disminuyendo el riesgo de enfermedades transmitidas por estos insectos, como la fiebre del virus del Nilo Occidental, el dengue y la malaria.

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