¿Cómo actuar si te pica una medusa en la playa?

Las picaduras de medusas no suelen ser muy graves, aun así, hay que tener en cuenta los casos que precisan intervención médica.

Por:

José Banco

Carabela portuguesa en la playa. Fuente: Unsplash

Las bellísimas playas españolas son el destino más elegido por turistas y ciudadanos que buscan disfrutar de las playas, divertirse y refrescarse. Sin embargo, no debemos olvidarnos que las aguas están habitadas por varias especies de medusas. Estos animales marinos son de aspecto gelatinoso y transparente, poseen tentáculos alrededor de su cuerpo con cientos de células urticantes o nematocistos, que utilizan tanto para defenderse como para paralizar a sus presas.

Medusa que comúnmente encontramos en las playas. Fuente: Unsplash

La carabela portuguesa es una de las especies más comunes

Denominada physalia physalis, comúnmente conocida como carabela portuguesa, mantiene alertados a todos los bañistas en las playas de la península por el riesgo de posibles contactos con las personas. Esta especie representa un riesgo importante para la salud, ya que sus tentáculos secretan una sustancia tóxica que produce un dolor muy fuerte, la cual puede llegar a provocar lesiones locales tales como inflamación, enrojecimiento, aparición de ampollas, descamación y reacciones cutáneas.

Las medusas no son animales agresivos, sus picaduras se generan por contactos involuntarios que producen irritación y ardor. Incluso cuando se encuentran en la orilla o fuera del agua, aunque estén muertas, sus toxinas siguen activas. Por eso no se recomienda tocarlas ni pisarlas.

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La carabela portuguesa representa un riesgo importante para la salud. Fuente: Unsplash


Te recomendamos cómo actuar ante picaduras por posibles contactos con estos invertebrados, siguiendo estos pasos:

1. Aléjate del mar: Si estás en el agua y sientes un ardor intenso y repentino en alguna parte de tu cuerpo, tienes que salir inmediatamente para poder ocuparte de la picadura en un lugar seguro.

2. No te refriegues la zona: puede que sientas una mezcla de ardor y picazón, pero evita rascarte tu piel afectada, ya que podría ulcerarse y empeorar el dolor.

3. Lava la herida con solución salina o agua de mar: enjuaga la zona con el agua para eliminar la arena que puede estar pegada. No utilices agua dulce porque, debido a la diferencia de PH, aumenta la liberación de la toxina y potencia la inflamación.

4. Coloca frío localizado, paños con vinagre o bicarbonato de sodio: el hielo ayuda a desinflamar la zona, pero es muy importante que no tenga contacto directo con la piel ya que suele estar hecho de agua dulce. Por otro lado, el vinagre o el bicarbonato de sodio disecan los restos de aguijones y calman el dolor, por lo que es recomendable agregar al bolso de playa una botellita con estas sustancias para poder actuar rápido en el caso de ser necesario.

    5. Chequea si persisten restos de medusa en la piel: a veces, luego del roce con los tentáculos, pueden quedar algunos restos de ellos o de sus diminutos aguijones en la piel. Es recomendable que observes la zona con buena luz y, si ves alguno, utilices una pinza de depilación desinfectada para retirarlos con cuidado y evitar que sigan liberando las toxinas.

6. Aplica crema con corticoides: para aliviar el dolor y la inflamación, se puede colocar alguna crema con corticoides 2 veces al día. Incluso, si lo consideras necesario, se pueden tomar antihistamínicos de venta libre por vía oral.

Por último y no menos importante, consulta con un médico si se forman ampollas en la zona afectada; el dolor es intenso y persiste por más de 2 horas; el enrojecimiento o sarpullido dura más de 2 semanas y si el malestar empeora (irritabilidad, náuseas, dificultad para respirar).

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