¿Por qué la IA jamás podría reemplazar a los humanos en labores vinculadas a la salud mental?

La IA, es una de las tecnologías actuales más famosas y útiles en el mundo, capaz de ser incluida prácticamente en todos los trabajos, pero no en este.

Por:

Julia Castro

La inteligencia artificial (IA), es una de las nuevas tecnologías que ha impulsado a los seres humanos ha crear e innovar en distintos aspectos de la vida cotidiana, tanto es así que la IA, se ha implementado como apoyo total en tareas como la creación de contenido, edición de imágenes e incluso en datos analíticos de grandes empresas, sin embargo existe una tarea que jamás podrá realizar esta herramienta.

Es claro, que el apoyo de las herramientas que brinda la IA son muy útiles, prácticas y ahorran tiempo en muchos aspectos del trabajo, sin embargo jamás podrían reemplazar el labor de un ser humano, ya que éste es capaz de analizar y conocer el contexto en el que tiene que realizar su trabajo diario. Aún así, hay un trabajo en el que la inteligencia artificial nunca podría entrar, y es el terreno de la salud mental.

El trabajo de los psicólogos y psiquiatras, es uno de los empleos más demandados en la actualidad, debido a que la salud mental y enfermedades como la ansiedad y el estrés han aumentado en los últimos años. Este trabajo se basa en entender y comprender conductas humanas, ser empático y conectarte con otro ser humano. Aunque un psiquiatra puede hacer uso de la IA, mediante herramientas de gestión de su trabajo, no podrá hacer que la IA, le dé una terapia psicológica a su paciente.

¿Qué hace ser a los psicología tan diferente para la IA?

Un joven no pudo llegar a su terapia por lo que decidió compartir sus problemas con ChatGPT, una de las herramientas más utilizadas en la IA. Para su sorpresa, cuando escribía, se percató que se sentía cómodo “discutiendo” una variedad de temas profundamente personales con el chat, tales como sus frustraciones y sus miedos. El chico se acostumbró a escribir algunos mensajes a ChatGPT cuando necesitaba desahogarse.

A pesar de esta sensación de “sentirse escuchado”, la herramienta de IA, ChatGPT no puede reemplazar la interacción entre paciente y terapeuta, ya que la empatía humana y la comprensión profunda son esenciales para que una terapia real funcione.

En un sondeo, realizado en un evento organizado por Medea Mind (un software para profesionales de la salud mental) y el Colegio Oficial de la Psicología de Madrid, se descubrió que aunque el 68% de los sanitarios identificaron la gestión administrativa, incluyendo la programación de citas y la facturación, como un área en la que la IA podría mejorar los procesos cotidianos, un 87% de estos, tiene preocupación por usarla debido a que podría poner en riesgo los datos de miles de pacientes.

En conclusión, aunque la IA puede reunir miles de datos de pacientes, conocer las emociones humanos, no podrá comprenderlas como los profesionales de la salud mental, ni hacer un diagnostico adecuado a la salud de los pacientes. Al menos, no por el momento.