Las polémicas de Eurovisión 2024: Descalifican a Países Bajos y abucheos a Israel; así llega el día de la final

La edición de este año de uno de los festivales musicales más importantes en Europa, Eurovisión, ha estado marcado por la política mundial.

Aunque el lema es “Unidos por la música”, la edición de este 2024 de Eurovisión ha resultado excepcionalmente divisiva. Debido a que el festival que enfrenta a naciones que aspiran a alcanzar la gloria en la música pop, llega a su fin en la ciudad sueca de Malmö con Israel en el ojo del huracán, ya que su presentación el el certamen ha provocado multitudinarias protestas propalestinas, y los asistentes sostienen que Israel debería quedar fuera por el conflicto en la Franja de Gaza, que ha dejado 35,000 civiles palestinos muertos, la mitad de ellos niños.

En este sentido se espera para este sábado, que miles de personas marchen por segunda vez convocados por la plataforma Stop Israel, que aglutina a 66 organizaciones, quienes comenzarán en la plaza de Stortorget y terminarán en el parque de Moelleplatsen para protestar contra la comparecencia a concurso de una representante israelí, Eden Golan quien fue abucheada durante su presentación con la canción “Hurricane”. En tanto, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, elogió a Golan, de 20 años, por actuar a pesar “de enfrentar una fea ola de antisemitismo”.

Nueve participantes de esta edición, siete de ellos clasificados para la final, han reclamado un alto el fuego en Gaza. La polémica es tal, que incluso personajes políticos como los ministros de Francia y Alemania han considerado “inaceptables” los llamados al boicot, pero en España, el socio minoritario del gobierno de izquierdas pidió la “expulsión de Israel”. En Finlandia y Bélgica grupos propalestina han pedido que se retiré a Israel.

La Unión Europea de Radiodifusión (UER), que hace dos años suspendió a Rusia por la guerra en Ucrania, confirmó en marzo la participación de Israel, aunque pidió a su representante modificar la canción presentada, ya que el título original de su canción “October Rain” (“Lluvia de octubre”) — una aparente referencia a la incursión de Hamás sobre el sur del país el 7 de octubre.

Una más, ¿por qué descalificaron al cantante de Países Bajos?

Joost Klein, representante de Países Bajos en Eurovisión fue expulsado de la competencia horas antes de la final del sábado por un incidente entre bastidores. La UER explicó la policía sueca está investigando “una denuncia realizada por una mujer del equipo de producción” y apuntó que no sería apropiado que Klein participase mientras había un proceso en su contra. Aunque los rumores apuntaban a que lo ocurrido podría estar relacionado con la delegación de Israel, la organización indicó que “no implicaba a ningún otro artista o miembro de las delegaciones”.

Por su parte, la televisora holandesa AVROTOS, una de las docenas de cadenas públicas que financian y emiten colectivamente el certamen, dijo que “considera que la descalificación es desproporcionada y está conmocionada por la decisión”.

Una gran apuesta musical para Eurovisión

26 artistas -desde los 37 que participaron en dos semifinales antes esta semana- interpretarán sus canciones de tres minutos frente a las miles de personas que llenarán el recinto y a unos 180 millones de telespectadores en todo el mundo.

Las canciones que optan a coronarse como la mejor del continente este año van desde lo emocional a lo excéntrico. Entre ellas destacan la nostalgia por la década de 1990 del finlandés Windows95man, que comienza la actuación dentro de un huevo gigante vestido con muy poca ropa. La irlandesa Bambie Thug invoca el espíritu de las brujas sobre el escenario y ha llevado a un instructor de gritos a Malmo, mientras que el grupo español Nebulossa reivindica con osadía un término utilizado como insulto hacia las mujeres en “Zorra.”

Entre los favoritos figuran le representante de Suiza, Nemo -quien sería la primera persona no binaria en llevarse el micrófono de cristal si su operística “The Code” encabeza las votaciones- y el croata Baby Lasagna. Su canción “Rim Tim Tagi Dim” es un vibrante número de rock que aborda el problema de los jóvenes que van del país en busca de una vida mejor.