Aprende a hacer Torrijas de vino tinto, el dulce más famoso de España

En el Día de Todos los Santos, una de las delicias más emblemáticas que se preparan en todo el país son las torrijas de vino.

Por:

Luciano Carluccio

En España, cada festividad lleva consigo una rica herencia culinaria, donde las recetas típicas se transmiten de generación en generación. En el Día de Todos los Santos, una de las delicias más emblemáticas que se preparan en todo el país son las torrijas de vino, un dulce tradicional arraigado en la cultura española.

Para preparar las torrijas de vino, se sumerge el pan en una mezcla aromática de vino tinto, azúcar o miel, y otros ingredientes como la ralladura de limón y la canela en rama. Una vez empapadas en esta mezcla, las rebanadas de pan se fríen hasta obtener un color dorado y una textura crujiente por fuera, pero suave y melosa por dentro.

Ingredientes para lograr la receta:

• Pan del día anterior.
• Vino tinto: 150 ml.
• Azúcar: 25 gramos.
• Azúcar glas para decorar.
• Ralladura de 1 limón.
• Canela en rama.
• 1 huevo.
• Aceite de girasol.

¿Cómo preparar las torrijas de vino?

Para este tipo de recetas, debes comenzar preparando la mezcla de vino tinto en una olla pequeña. Combina el vino tinto, 150 ml de agua, el azúcar, la ralladura de limón y la canela en rama. Lleva la mezcla a ebullición y deja que hierva durante unos minutos para que los sabores se integren completamente. Luego, retira del fuego y deja que se enfríe ligeramente.

Mientras tanto, corta el pan en rebanadas de grosor medio y sumérgelas en la mezcla de vino durante unos segundos, permitiendo que absorban los sabores. Un tip de la receta es no dejar el pan en remojo durante mucho tiempo para evitar que se vuelva demasiado blando.

Te podría interesar

Precio de la luz hoy Sábado, 5 de octubre: ¿Cuándo está más barata y más cara?

Baja laboral flexible: ¿Qué es? ¿Cómo funciona? ¿Qué propone el Gobierno?

Una vez que las rebanadas de pan estén impregnadas con la mezcla de vino, escúrrelas ligeramente para eliminar el exceso de líquido. A continuación, pásalas por huevo batido, asegurándote de cubrir completamente cada rebanada. Ya casi tienes las torrijas de vino.

Calienta una cantidad generosa de aceite de girasol en una sartén grande a fuego medio-alto. La receta dice que, cuando el aceite esté caliente, fríes las rebanadas de pan por ambos lados hasta que estén doradas y crujientes.

Una vez fritas, retira las torrijas de vino de la sartén y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.

Para servir, espolvorea las torrijas de vino con azúcar glas y, si lo deseas, añade un toque extra de canela en polvo.