Impactantes protestas en más 1.400 ciudades de EEUU en contra de las políticas de Trump

En los 50 estados del país, hubo concurridas manifestaciones en oposición a la administración del presidente ultraderechista.

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Por:

Cristian Ortega Mahan

Impactantes protestas en más 1.400 ciudades de EEUU en contra de las políticas de Trump
En más de 1.400 ciudades de Estados Unidos se registraron protestas contra Donald Trump. Fuente: Canva - La Península - X @altoque_ok

Estados Unidos vivió este sábado una jornada histórica de movilización social, con protestas masivas en más de 1.400 ciudades y municipios de los 50 estados del país.

Bajo el lema “¡Manos fuera!”, miles de ciudadanos salieron a las calles para expresar su rechazo a las políticas del presidente Donald Trump y su aliado, el multimillonario sudafricano Elon Musk.

El freno del progresismo

La convocatoria, organizada por más de 150 grupos progresistas, marcó un hito en la resistencia contra las medidas que, según los manifestantes, están erosionando derechos fundamentales y profundizando las desigualdades sociales en Estados Unidos.

Las protestas, que abarcaron desde grandes urbes como Nueva York, Los Ángeles y Chicago hasta pequeñas localidades rurales, se centraron en denunciar los recortes en programas públicos como Medicaid y Seguridad Social, la deportación masiva de inmigrantes y la eliminación de agencias gubernamentales clave.

Además, los manifestantes criticaron los beneficios fiscales otorgados a los más ricos y la creciente influencia de Musk en la administración federal, especialmente en su papel al frente del Departamento de Eficiencia Gubernamental.

Una movilización sin precedentes

En Washington D.C., miles de personas se congregaron en la Explanada Nacional, cerca del Capitolio y la Casa Blanca, portando pancartas con consignas como “No al autoritarismo” y “Basta de cleptocracia”.

Entre los oradores destacados se encontraba Jamie Raskin, miembro de la Cámara de Representantes, quien comparó las políticas de Trump con las de líderes autoritarios del pasado. “Nuestros padres fundadores escribieron una Constitución que no empieza con la frase ‘Nosotros, los dictadores’”, afirmó Raskin, generando aplausos entre los asistentes.

    En Nueva York, la lluvia no fue impedimento para que miles de personas marcharan por los alrededores de Bryant Park, en Manhattan. Los manifestantes, que incluían trabajadores despedidos, activistas de derechos humanos y miembros de la comunidad LGTBIQ+, portaban banderas y pancartas con mensajes como “Ningún ser humano es ilegal” y “Quita las manos de nuestros empleos”.

Mary Helen, una residente de la ciudad, expresó su frustración: “Estoy aquí por mi vecino, que ha sido excluido de un tratamiento médico experimental debido a los recortes federales. Esto no puede continuar”.

El impacto de las políticas de Trump

Desde su regreso a la Casa Blanca en enero, Trump ha implementado una serie de medidas que han generado controversia y rechazo. Entre ellas se encuentran la reducción del tamaño del Gobierno, el despido de miles de empleados federales y la imposición de aranceles comerciales que han afectado a sectores clave de la economía. Estas políticas, según los críticos, están diseñadas para beneficiar a una élite económica mientras perjudican a las comunidades más vulnerables.

El papel del magnate sudafricano Elon Musk en la administración también ha sido objeto de críticas. Como líder del Departamento de Eficiencia Gubernamental, Musk ha promovido la eliminación de oficinas de la Administración del Seguro Social y la privatización de servicios públicos, lo que ha generado preocupación entre los defensores de los derechos sociales.

Reacciones y perspectivas

Las protestas del sábado han sido calificadas como las más multitudinarias desde que Trump asumió el cargo. Según los organizadores, casi 600.000 personas participaron en las movilizaciones, enviando un mensaje claro de resistencia y unidad. “Han despertado a un gigante dormido, y todavía no han visto nada”, declaró Graylan Hagler, un activista de 71 años.

A pesar de la masividad de las protestas, la Casa Blanca ha minimizado su importancia, argumentando que Trump sigue siendo popular entre sus bases. Sin embargo, encuestas recientes muestran que su índice de aprobación ha caído a niveles históricos, reflejando el creciente descontento entre la población.

Las protestas en más de 1.400 ciudades de Estados Unidos representan un momento decisivo en la lucha por los derechos sociales y la justicia económica. Mientras los manifestantes continúan organizándose para enfrentar las políticas de Trump, el país se encuentra en una encrucijada que definirá su futuro político y social.

En paralelo, la guerra comercial desatada por Trump la semana pasada, ha hecho que decenas de países respondan de la misma manera, incluso generando alianzas inéditas como la que firmaron China, Japón y Corea del Sur para “protegerse” de los aranceles de Estados Unidos.

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