Una mujer se deja más de 20.000 Euros en el dentista y acaba perdiendo todos los dientes

El dentista la convenció para realizar una intervención y esto ha salido, pero de lo que jamás pudo haber imaginado.

Por:

Adonis Martínez

A diferencia de otras disciplinas médicas como la pediatría o la oftalmología, los costos de las intervenciones dentales pueden resultar exorbitantes. Este alto precio, combinado con la posibilidad de malos procedimientos, puede generar situaciones muy complicadas para quienes buscan mejorar su salud bucodental.

Una mujer residente en Karratha, Australia Occidental, decidió en 2022 someterse a un tratamiento de implantes dentales en su consulta de confianza. Inicialmente, quería realizarse el tratamiento solo en los dientes superiores, pero el dentista le propuso un plan más costoso que incluía también los dientes inferiores, lo que incrementaba el precio total a más de 26.000 euros.

Dado que no disponía de los fondos suficientes, el profesional sugirió que utilizara su fondo de jubilación para cubrir la diferencia, reduciendo el precio final a 21.829 euros. Esta recomendación parecía una salida viable, pero pronto se convertiría en el principio de una experiencia mucho más compleja y dolorosa de lo que la paciente había anticipado.

Un desfalco en el dentista, que acabó detenido

Para marzo de 2023, la mujer ya había pagado una cantidad considerable de 16.368 euros por su tratamiento, pero pronto se dio cuenta de que no había sido completamente informada sobre los costos adicionales. Según cuenta, no le advirtieron que se utilizarían 4.676 euros extra de su fondo de jubilación, correspondientes a impuestos, lo que la tomó por sorpresa.

A pesar de que habría aceptado los términos de todos modos, la mujer lamenta no haber sido debidamente informada sobre estos gastos adicionales. “Lo habría hecho igualmente, pero me habría gustado estar informada”, declaró al medio ABC News, dejando claro su descontento con la falta de transparencia en el proceso.

Poco después de realizar el pago, la paciente pasó por una intervención en la que le extrajeron ocho dientes frontales y le implantaron los tornillos correspondientes, que deberían permanecer allí hasta la siguiente fase de la operación. Sin embargo, tras invertir cerca de 3.000 euros más en diversas exploraciones y moldes, le informaron que el dentista había sido detenido.

Su nuevo dentista, también detenido

Tras la detención de su dentista, la mujer fue derivada a otro especialista para continuar con su tratamiento. Sin embargo, el nuevo profesional utilizaba un procedimiento diferente para la implantación, lo que la obligó a repetir las pruebas, incluyendo moldes y radiografías. A esto se sumó un nuevo problema: algunos de los implantes temporales se rompieron, y cuando intentó contactar con el dentista, descubrió que él también había sido arrestado.

El golpe fue devastador. “Estaba llorando desconsoladamente y estaba muy enfadada”, recuerda la mujer, quien se vio atrapada en una situación sin solución clara. A pesar de ello, asegura que no tiene quejas sobre el trato recibido, pero sí exige que se le ofrezca una respuesta justa: que se completen los implantes por los que ya ha pagado o que se le reembolsen al menos 7.599 euros.

Consciente de las dificultades legales y económicas del proceso, la mujer no espera recuperar todo su dinero. “Entiendo que estos ocho tornillos en mi mandíbula costaron dinero y su tiempo. No voy a pedirle que me devuelva los 19.290 euros completos”, admite, aunque recalca que la situación le ha dejado con pérdidas económicas significativas.