¿El Papa Francisco renunciará al Vaticano? Esta ha sido su respuesta

El sumo pontífice ha respondido los rumores alrededor de una presunta renuncia.

La hospitalización del papa Francisco reavivó el debate sobre la sucesión papal y el manejo del Vaticano en caso de que la Santa Sede quede vacante por fallecimiento o enfermedad prolongada.

A diferencia de los gobiernos nacionales, donde hay un sucesor inmediato, en la Iglesia católica este proceso está regulado por el derecho canónico. Expertos señalan que la administración de la curia sigue operando con normalidad durante ausencias temporales. Además, el papa Francisco puede delegar su poder en personas con autoridad vicarial.

Sin embargo, actualmente el cardenal José Tolentino de Mendonça celebró la misa dominical, aunque el poder papal solo se transfiere en caso de renuncia o fallecimiento. En ese escenario, se inicia el “interregnum”, durante el cual el camarlengo, actualmente el cardenal Kevin Farrell, gestiona los asuntos administrativos del Vaticano hasta la elección de un nuevo papa.

¿El papa Francisco presentó su renuncia?

El cardenal Gianfranco Ravasi afirmó que el papa Francisco podría renunciar si su salud le impide cumplir con sus deberes. Sin embargo, aseguró que su deseo es mantenerse en funciones al menos hasta el Jubileo.

Según Ravasi, el pontífice tomará la decisión por sí mismo, posiblemente con asesoramiento, pero con total autonomía. Cabe destacar que desde el inicio de su pontificado, Francisco firmó una carta de renuncia preventiva, al igual que Pablo VI.

Mientras tanto, surgieron rumores infundados sobre su estado de salud, especialmente en redes y medios estadounidenses, donde persiste una corriente de oposición hacia su liderazgo.

¿Quién sería papa si Francisco renuncia?

A causa de el estado de salud del papa Francisco, de 88 años, comenzó a hablarse de la posibilidad de su renuncia. Este sería un evento excepcional, similar al caso de Benedicto XVI en 2013.

Según el Código de Derecho Canónico, su dimisión sería voluntaria y no necesitaría aprobación, pero se informaría al Colegio de Cardenales. Luego, el mismo asumiría la dirección de la Iglesia Católica en el período de Sede Vacante hasta la elección de un nuevo pontífice.

Si se produjera su renuncia, el cónclave de cardenales menores de 80 años se reuniría en la Capilla Sixtina para elegir a su sucesor, requiriendo una mayoría de dos tercios. Mientras tanto, los fieles siguen atentos a la evolución de su estado de salud y a las decisiones que puedan tomarse en el Vaticano.