El ceño fruncido de Donald Trump tiene una explicación científica

Este lunes se oficializa el regreso de Trump a la Casa Blanca para iniciar su segundo mandato como presidente de Estados Unidos.

A pocos días de asumir oficialmente la presidencia de Estados Unidos por segunda vez, Donald Trump ya tiene su retrato oficial listo para ser presentado. La fotografía fue tomada por su fotógrafo personal, Daniel Torok, y rápidamente se ha hecho viral en las redes sociales.

Lo que más destaca en la imagen es el ceño fruncido y la expresión seria de Trump, un contraste evidente con su retrato de 2017, cuando se le veía más sonriente y relajado. Cada detalle de la foto tiene un propósito: el gesto de Trump busca transmitir un mensaje claro y deliberado al pueblo estadounidense, mostrándose más serio y determinado en su regreso al poder.

El propio Torok compartió la imagen en su cuenta de X, acompañada de un mensaje que reafirma la postura de Trump: “Estamos entrando en la edad de oro de América”. En la foto también aparece el vicepresidente J.D. Vance, quien, a diferencia de Trump, luce una pequeña sonrisa, generando un contraste aún mayor entre ambos.

¿Qué significa el ceño fruncido de Donald Trump?

El lenguaje no verbal ha sido un tema de creciente interés, especialmente en la política, donde las expresiones y gestos de los líderes se analizan con detenimiento. Un claro ejemplo de esto es el retrato oficial de Donald Trump, donde su rostro serio y su ceño fruncido transmiten una sensación de firmeza y control. A diferencia de su primer retrato presidencial en 2017, donde se le veía sonriente y accesible, esta imagen refleja una postura más dura y determinada.

En esta nueva fotografía, Trump opta por una actitud que comunica autoritarismo y preparación para enfrentar los retos que vienen con su segundo mandato. Su expresión refleja la seriedad con la que se enfrenta a los desafíos, y cada detalle en su postura parece diseñado para proyectar una imagen de poder y liderazgo.

Esta elección de imagen no es casual. Trump ha decidido mostrar un rostro que simboliza su disposición para tomar decisiones difíciles, buscando transmitir una imagen de solidez ante su regreso a la Casa Blanca. Con este gesto, intenta reafirmar su autoridad y enviar un mensaje claro a la nación de que está listo para gobernar con mano firme.

Esto dice la ciencia sobre fruncir el ceño

Fruncir el ceño implica la contracción de los músculos entre las cejas, creando arrugas en la frente. Aunque comúnmente se asocia con emociones negativas como enojo o frustración, también puede ser señal de concentración profunda o reflexión.

Esta expresión está vinculada al sistema límbico, encargado de procesar emociones, y se produce de forma automática como respuesta emocional. Además, sirve como una señal social que comunica incomodidad o esfuerzo mental, algo estrechamente relacionado con Donald Trump y temas como Groenlandia o el Canal de Panamá.

Investigaciones en psicología sugieren que fruncir el ceño no solo refleja emociones, sino que puede intensificarlas, según la teoría del feedback facial, que plantea que las expresiones pueden influir en el estado emocional de la persona.