Una mujer pierde la vida tras participar en un ritual con veneno de sapo

Una mujer falleció tras participar en una ceremonia que incluía quemaduras en la piel y la aplicación de kambó, provocándole vómitos y graves malestares.

Por:

Adonis Martínez

Así falleció esta mujer tras hacer un extraño ritual. Fuente: Producción en Canva PRO y La Península.

Marcela Alcázar, de 33 años, perdió la vida el pasado 1 de diciembre tras participar en un ritual espiritual en el que se utilizó veneno de sapo. El suceso ocurrió en el Centro Moyocoyani, un espacio que se promociona como especializado en terapias de medicina ancestral. Durante el retiro, Marcela fue sometida a un ritual en el que se le aplicó kambó, una sustancia extraída del veneno de rana. Según los testimonios, la práctica consistió en realizar pequeñas quemaduras en la piel y aplicar el veneno directamente sobre las heridas, un método habitual en este tipo de ceremonias.

Tras el procedimiento, Marcela comenzó a presentar síntomas graves como vómitos y diarrea. Testigos aseguran que los responsables del ritual no permitieron que recibiera asistencia médica inmediata, argumentando que las reacciones formaban parte del proceso de sanación. Cuando finalmente fue trasladada a la Cruz Roja, los sanitarios no pudieron hacer nada por salvar su vida. Su cuerpo fue llevado al Servicio Médico Forense para realizarle la autopsia, mientras las autoridades evalúan investigar los hechos como un posible caso de homicidio.

¿Qué es el Kambó?

El kambó es un veneno natural extraído de la rana Phyllomedusa bicolor, comúnmente conocida como rana kambó o rana mono gigante, que habita en las selvas tropicales de Brasil, Bolivia, Colombia, Guyana, Perú y Venezuela. Este anfibio segrega una sustancia tóxica como mecanismo de defensa frente a depredadores, y desde hace siglos, su veneno ha sido aprovechado por comunidades indígenas de la región.

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Pueblos como los katukinas, kaxinawás y ashaninkas lo emplean en rituales tradicionales que buscan fortalecer el sistema inmunológico y mejorar la resistencia física. Además, el kambó es utilizado como preparación para la caza, ya que sus efectos, según estas comunidades, aumentan la concentración y la energía, y eliminan toxinas del cuerpo.

Los peligros de estos rituales

En los rituales tradicionales que emplean kambó, los chamanes capturan a la rana y extraen cuidadosamente su secreción venenosa, que luego utilizan durante la ceremonia. El proceso incluye realizar pequeñas quemaduras en la piel de los participantes y aplicar el veneno directamente sobre las heridas abiertas. Según las creencias de las comunidades indígenas, esta práctica tiene propiedades desintoxicantes, ayudando a limpiar el cuerpo y promover tanto el bienestar físico como emocional.

Sin embargo, los especialistas advierten que el uso del kambó no está exento de riesgos. La sustancia puede provocar reacciones adversas graves, como vómitos, diarrea, aceleración del ritmo cardíaco o, en casos extremos, la muerte.

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