El sector, en alerta: Italia analiza subir el “impuesto a los turistas” a 25 euros la noche

La propuesta busca ayudar a las ciudades turísticas y “responsabilizar” a sus visitantes. Podría perjudicar a ciertas ciudades respecto a otras de Europa.

Por:

Cristian Ortega Mahan

Giorgia Meloni, primera ministra de Italia, impulsa la suba del llamado "impuesto a los turistas". Fuente: Canva - X @GiorgiaMeloni

El Gobierno italiano está evaluando una propuesta para incrementar el impuesto al turismo a hasta 25 euros por noche, más del doble de los 10 euros actuales. Esta medida, que busca apoyar a las ciudades turísticas y promover una mayor responsabilidad entre los visitantes, ha encontrado oposición entre las asociaciones empresariales del sector, según informa el diario británico The Financial Times.

El nuevo esquema propuesto elevaría el tope del impuesto a 25 euros por noche para estancias en habitaciones con tarifas superiores a 750 euros. Las tarifas actuales se ajustarían a 5 euros para habitaciones de hasta 100 euros, 10 euros para habitaciones entre 100 y 400 euros, y 15 euros para las de entre 400 y 750 euros.

Las playas de Italia, irresistibles. Fuentes: Pexels

De qué se trata la propuesta

La ministra de turismo, Daniela Santanchè, defensora de la propuesta y miembro del partido de la primera ministra Giorgia Meloni, ha argumentado en sus redes sociales que el objetivo del incremento es “mejorar los servicios y fomentar una mayor responsabilidad entre los turistas”. En septiembre, el ministerio de Santanchè iniciará una ronda de negociaciones con representantes del sector para evaluar posibles modificaciones a la propuesta.

Publicidad

    Las críticas no se han hecho esperar. Federalberghi, la asociación de pymes hoteleras, ha manifestado que el objetivo debería ser apoyar el crecimiento del sector en lugar de obstaculizarlo. Federturismo, que agrupa a varios sectores turísticos, también ha expresado su rechazo, criticando el uso indebido del impuesto por parte de algunos ayuntamientos para cubrir déficits presupuestarios, en lugar de destinarlo a mejoras que beneficien directamente a los turistas.

La normativa italiana actual estipula que los ingresos del impuesto turístico deben ser invertidos en servicios relacionados con el turismo, como señalización multilingüe y mantenimiento de atractivos turísticos. Sin embargo, la nueva propuesta permitiría que los fondos se utilicen también para la recolección de basura, lo que ha generado preocupación.

Martina Lalli, presidenta de Federturismo, ha señalado que “aunque es crucial tener una ciudad limpia, no es justo que el dinero de los turistas se destine a solucionar problemas en áreas que no visitan”.

Desde la asociación de grandes cadenas hoteleras, Confindustria Alberghi, se teme que el aumento del impuesto pueda afectar negativamente la competitividad de Italia en el mercado turístico europeo. Bárbara Casillo, presidenta de la asociación, advirtió que “si damos la impresión de querer maximizar la recaudación a expensas de los turistas, no estamos haciendo un buen servicio al país”.

El Parlamento italiano debatirá la propuesta. Fuente: Unsplash

¿Fuente de ingresos por el fuerte endeudamiento?

Italia enfrenta un elevado nivel de deuda pública, que podría alcanzar el 140% del PIB para finales del año, según el Fondo Monetario Internacional. El impuesto al turismo ha sido una fuente importante de ingresos para el Estado. En el 2019, se recaudaron 470 millones de euros a través de este impuesto en unos 1.200 municipios. La reforma de 2023 permitió a los municipios con más de veinte veces su población en turistas cobrar hasta 10 euros por noche, incrementando los ingresos en más del 60%, alcanzando un total de 775 millones de euros ese año.

Temas relacionados