Religiosos organizan robo para eliminar pruebas a dos hombres a los que habían agredido sexualmente en Italia

Otras personas, además de los religiosos, también fueron detenidos por la policía italiana, ya que estuvieron involucrados en los hechos.

Por:

Julia Castro

Dos religiosos fueron detenidos por “violencia sexual” tras organizar un robo destinado a sustraer los móviles de sus víctimas y así eliminar las pruebas de abuso sexual contra ellos, informó la fiscalía de Nápoles en el sur de Italia. El caso comenzó en abril cuando dos hombres, residentes en Afragola, localidad cercana a la localidad, fueron víctimas de un robo en el que los autores solo se llevaron un teléfono móvil y huyeron antes de encontrar el segundo, según informó la fiscalía.

Debido a que el sustrajo “presentaba anomalías”, las víctimas inmediatamente lo relacionaron con las agresiones sexuales sufridas a manos de dos frailes franciscanos en las instituciones donde trabajaban, detalla el comunicado. En este sentido, la investigación se inició de inmediato, lo que ha revelado la realidad de estos abusos perpetrados “en varios monasterios, incluida la Basílica de Sant’Antonio de Afragola”.

¿Qué guardaban los móviles robados?

Las víctimas escribieron ellos mismos a los superiores de los religiosos, a través de su abogado, para denunciar las agresiones, ya que de acuerdo con las autoridades, los padres sometían a los hombres a relaciones sexuales a cambio de ropa, comida o un empleo.

“En 2016 conocí al fraile en un chat de citas”, detalló una de las víctimas, citado por el diario italiano Il Corriere della Sera. “El fraile no solo mantenía relaciones sexuales conmigo, sino que me pedía que le encontrara otros chicos”, afirmó, mencionando “orgías”. Mientras los encuentros íntimos aumentaban con la amenaza de perder cualquier tipo de ayuda.

De acuerdo con medios una de las víctimas es un italiano y la otra un hombre de un país fuera de la Unión Europea (UE). En tanto, la fiscalía reveló que el robo había sido ordenado para sustraer los móviles de las víctimas los cuales contenían “imágenes y conversaciones muy comprometedoras y que podrían causar serios problemas a ciertos religiosos de los monasterios”. En ese sentido, fue el párroco de Afragola, quien ordenó el robo, por lo que fue detenido.

Además, otras cuatro personas -dos ejecutores y dos intermediarios- también fueron detenidas, según la fiscalía. Además de los dos sacerdotes, se detuvo a un hombre de 52 años y a otro de 43 de Afragola, a los que Gildi recurrió para cometer el robo, así como a un joven de 20 años de San Vitaliano y a otro de 19 de Marigliano, que fueron autores materiales del robo.

Por su parte, el arzobispo de Nápoles Mimmo Battaglia indicó haber suspendido al párroco.