Guardia Civil detiene a un hombre por liarse a tiros con el gato de su vecina, en Granada

La dueña lo llevó al veterinario y descubrió varios balines en su interior, ahora queda ver qué sucede con el autor de los hechos.

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Por:

Adonis Martínez

Guardia Civil
Imágenes oficiales del Ministerio del Interior. Fuente: Guardia Civil.

La Guardia Civil ha tomado declaración como investigado a un hombre de 89 años en La Zubia (Granada), acusado de un presunto delito de maltrato animal. Los hechos se conocieron después de que una vecina del municipio descubriera a su gato herido y con la cara cubierta de sangre, por lo que decidió llevarlo de inmediato al veterinario.

Durante la revisión, el profesional detectó que el gato tenía tres balines de plomo incrustados en el cuerpo, uno de ellos en el interior del cráneo, afectando gravemente a su ojo izquierdo. Las lesiones confirmaron que no se trataba de un accidente, sino de un acto intencionado, lo que llevó a la propietaria a denunciar el caso ante la Guardia Civil.

La mujer presentó el informe veterinario junto con los proyectiles extraídos, lo que permitió a los agentes abrir una investigación. Gracias a los datos aportados por la denunciante, se logró identificar al presunto autor, que ya ha sido puesto a disposición judicial para esclarecer su implicación en los hechos.

El detenido era el titular del arma de aire comprimido

    La investigación de la Guardia Civil se centró rápidamente en la zona donde presuntamente se produjeron los disparos. Tras una inspección ocular detallada, los agentes lograron identificar una vivienda desde la cual, según sus indicios, podrían haberse efectuado los tiros que hirieron al gato. Una vez localizada, recabaron información sobre su ocupante.

Las pesquisas revelaron que el residente era propietario de un arma de aire comprimido. Los agentes confirmaron que en el domicilio se encontraba una carabina del calibre 4,5 mm, que coincidía con el tipo de proyectil que se extrajo del cuerpo del animal herido, reforzando la hipótesis de su implicación directa en los hechos.

Guardia Civil Cartagena
La Guardia Civi.Fuente: Guardia Civil.

Con todas las pruebas sobre la mesa, los agentes intervinieron el arma y pusieron al hombre, de 89 años, a disposición judicial. Se le investiga por un presunto delito de maltrato animal, a la espera de que la autoridad competente determine las responsabilidades penales correspondientes.

Posibles penas por este acto

Disparar a un gato con una carabina de aire comprimido ya no es un simple “incidente desafortunado”. Es un delito, y así lo contempla la ley. El hombre de 89 años investigado en La Zubia podría enfrentarse a una pena de prisión de hasta un año y medio si se confirma que causó lesiones al animal con intención. Y no solo eso: también podría ser inhabilitado para tener o trabajar con animales durante varios años.

La clave está en los detalles. El gato no solo resultó herido, tuvo que ser tratado por un veterinario y tenía tres balines de plomo incrustados en el cuerpo, uno de ellos en el cráneo. Eso eleva la gravedad del caso. Si el juez considera que hubo ensañamiento o que se empleó un medio especialmente dañino, como un arma, las penas podrían aumentar notablemente.

Más allá de la edad del acusado, el mensaje que lanza la ley es claro: el maltrato animal tiene consecuencias. Y en este caso, no basta con decir que fue un accidente. La investigación apunta a un disparo directo desde una vivienda cercana, con un arma que encaja con los proyectiles encontrados en el cuerpo del animal. Ahora será la justicia quien decida.

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