Encuentran el cadáver de un hombre perdido hace un año en Aragón

El cadáver fue encontrado por mera casualidad por un grupo de trabajadores, que alertaron a las autoridades.

Un equipo de técnicos de Adif encontró por casualidad el cadáver de un hombre mientras realizaba trabajos de mantenimiento en las vías del tren, cerca del viaducto de la N-330 en Zaragoza.

El hallazgo se produjo el 23 de enero y, debido al avanzado estado de descomposición del cuerpo, fue necesario realizar pruebas de ADN para confirmar su identidad. Las pruebas forenses determinaron que se trataba de José Ramón Tovar Camarero, un vecino de Cuarte de Huerva de 42 años.

Su familia había denunciado su desaparición el 7 de septiembre de 2023. Aunque la investigación sigue abierta, la principal hipótesis apunta a que el hombre podría haberse quitado la vida.

Hace un año se denunció su desaparición

El 7 de septiembre de 2023, la familia de José Ramón Tovar Camarero denunció su desaparición, lo que dio inicio a una intensa búsqueda que se prolongó durante meses sin éxito.

No fue hasta finales de enero cuando su cadáver fue encontrado en las inmediaciones del viaducto de la N-330, en Zaragoza. Durante la investigación, equipos de buceo rastrearon el río Huerva y numerosos vecinos se unieron a los esfuerzos por localizarlo, pero las batidas no dieron resultado.

Finalmente, la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) de la Guardia Civil tomó las riendas del caso y logró confirmar la identidad del fallecido tras su hallazgo. Las primeras pesquisas apuntan a que la causa de la muerte fue un suicidio por ahorcamiento, aunque las autoridades continúan analizando todos los detalles para esclarecer completamente lo sucedido.

¿Cómo llega la científica a la conclusión del cómo se produce una muerte?

Para determinar cómo ocurrió una muerte, los forenses analizan el cuerpo y su entorno mediante una autopsia, donde examinan lesiones, órganos y fluidos. Factores como la rigidez cadavérica o la descomposición ayudan a estimar el tiempo del fallecimiento, mientras que el estudio de fracturas o hemorragias puede revelar si hubo violencia o una causa médica subyacente.

Además, pruebas toxicológicas permiten detectar drogas o venenos, y en casos de difícil identificación, el ADN y la entomología forense pueden aportar pistas clave, como ha resultado ser en este caso en concreto.