La nieve podría cubrir buena parte de España, según la Aemet

La incertidumbre sobre una posible nueva Filomena sigue presente en los pronósticos meteorológicos para España.

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Por:

Adonis Martínez

Nieve en España
La Aemet preveé la nieve en gran parte de la península. Fuente: Península Es/Pexels.

Un frente de frío atravesó la península ibérica, permitiendo el ingreso de aire gélido de origen polar que comenzó a extenderse por el territorio. Al mismo tiempo, una borrasca en formación sobre el archipiélago de las Azores empezó a ganar protagonismo en los modelos meteorológicos, señalando el inicio de un cambio relevante en las condiciones climáticas.

Ángel Rivera, exmeteorólogo de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), destacó la importancia de este fenómeno. Según explicó, la interacción entre el aire frío polar y la borrasca en desarrollo podría dar lugar a una retrogresión atmosférica, un evento que podría generar nevadas en gran parte de la península durante los próximos días.

El fenómeno climático en imágenes

El meteorólogo también subrayó varios aspectos visuales fascinantes relacionados con el fenómeno, destacando ciertos patrones atmosféricos que llamaron la atención. “Mientras tanto, pudimos observar imágenes impresionantes, como la llegada de aire africano extremadamente seco hacia el Atlántico tropical. Este aire, al ingresar a la región, trazaba una línea clara y visible entre Canarias y Cabo Verde, creando un perfil bien definido del continente”, explicó Rivera, refiriéndose a la peculiaridad de este fenómeno.

La entrada del aire seco africano no solo marca un cambio importante en las condiciones del clima en el Atlántico, sino que también contribuye a modificar el equilibrio de temperaturas y precipitaciones en varias zonas de la península. Según el experto, este fenómeno visual es solo una pequeña parte de los intensos procesos atmosféricos que podrían desencadenarse en los próximos días.

Las imágenes ampliadas revelaron detalles fascinantes, como señaló el experto: “Las calles de estratocúmulos delineaban claramente la trayectoria del viento, mostrando cómo una parte de él giraba hacia el norte para converger con la borrasca en desarrollo sobre las Azores. Incluso era visible un débil remolino de Von Karman a sotavento de Cabo Verde”.

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