La barbarie despues de DANA: Saqueos, usurpaciones y debastecimiento

Los relatos de los valencianos desesperados que deben defender lo suyo de los delincuentes.

Miedo, desesperación e indignación son los sentimientos que abundan en la mayoría de los valencianos que fueron testigos del paso de la DANA por su región y que dejó, hasta el momento, más de 210 muertes, miles de heridos y desaparecidos. El agua y barro son la evidencia de los ríos de gran caudal que tomaron casas, comercios, avenidas y las calles. A esto se le sumó el aprovechamiento de inescrupulosos, por definirlos de alguna manera, que aprovecharon con impunidad saquear comercios y centros comerciales debido a que las fuerzas de seguridad estaban ocupadas auxiliando a los más necesitados. Es por eso que te damos una guía para actuar en caso de que tu vehículo haya sido arrastrado por la corriente.

El engaño que utilizan los timadores es que se hacen pasar por Bomberos que vienen a rescatar a sus víctimas, en otras ocasiones golpean las puertas ofreciéndoles el agua que necesitan, ya que es un recurso que escasea en la región.

Los saqueos y las usurpaciones

“Ayer a la noche (por el viernes) y con plena lluvia, había un grupo atacando y asaltando a la gente que había perdido todo. Las principales víctimas fueron los adultos mayores, los cuales los delincuentes los engañaban para salir de casa en busca de agua y terminaban robándoles todo lo que habían rescatado de DANA”, relató Dana Laterra a La Península ES. Otro modus operandi, fue que varios aprovecharon para okuparles su hogar, dejando a las víctimas desamparadas.

Asimismo, los supermercados también fueron uno de los lugares que fueron asaltados por una turba, que no tenía hambre o necesitaba de los recursos para subsistir, sino que las trasladaban al centro de Valencia para venderlas.

Las imágenes de lo sucedido se puede ver en los videos publicados por la Guardia Civil, en donde se puede ver a un efectivo revisándoles las bolsas a un hombre que llevaba varias zapatillas de marca. En otras imágenes se observa como un joven saca de sus bolsillos y ropa interior varios celulares. Asimismo, se pueden vislumbrar vitrinas rotas de una perfumería y comercios que han sido arrasados por los sospechosos de robar mercadería y no por la tormenta que pasó.

“Hay una joyería acá cerca y los dueños se han encadenado en la puerta del local para evitar que los asalten”, comentó Dana, quien aseguró que la situación es dramática.

Desabastecimiento en los supermercados

Hace unos días, la Asociación de Supermercados de la Comunidad Valenciana emitió un comunicado en donde han destacado que la estructura de la distribución alimentaria en la provincia de Valencia es sólida y, por tanto, han garantizado el suministro de productos en sus tiendas. Sin embargo, los valencianos han desmentido esta situación y aseguran que no consiguen agua, papel, ni alimentos. “Es similar a lo que vivimos en los comienzos de la Pandemia”, reveló Julieta Delgado a La Península ES.

En ese sentido, la joven filmó un video de un supermercado de la zona y se puede ver una larga fila de personas que buscan abastecerse con los pocos artículos que quedaron. A su vez, Daniela Pérez le contó a este medio que entre los vecinos se ayudan y comparten lo que tienen para subsistir.

“Antes de que llegara la DANA y nos sorprendiera a todos por la forma en que arrasó con todo, fui de a poco abasteciéndome sobre todo con cosas que necesitaba para mi beba: pañales, leche en polvo, comida, productos higiénicos. Sin embargo, no sé cuánto tiempo pueda estar en esa situación”, reveló preocupada Natalia Quilina.

La misma situación ocurre a varios kilómetros de las zonas del desastre, en el centro de Valencia, lugar en donde la vida sigue con normalidad y solo tuvieron lluvia. “Fui a tres supermercados y no hay nada, no se consigue agua, alimentos, nada, están completamente desabastecidos”, contó Dana.

A partir de esa situación, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha asegurado que proporcionará todos los recursos para ayudar a la comunidad de Valencia: 5.000 militares más estarán en los lugares que más los necesitan, lo mismo que irán efectivos de las fuerzas de seguridad y también llevarán alimentos.

Hasta el momento en Valencia abunda la solidaridad, la compasión y el deseo de restaurar una región que fue arrasada por un río de grandes dimensiones de agua y barro.