Citan a declarar de urgencia a los 17 becarios de Nacho Cano, sigue la polémica

Los afectados testificarán como testigos el jueves 29 de agosto en el caso de la trama de contratación ilegal de migrantes que involucra a Nacho Cano.

La investigación sobre la contratación irregular de inmigrantes en Malinche, el musical bajo la dirección del artista, sigue su curso y le da un revés a los intereses de Nacho Cano.

Este martes, el Juzgado de Instrucción 19 de Madrid ha ordenado que los 17 estudiantes mexicanos contratados por Cano comparezcan como testigos y presuntas víctimas. La audiencia está programada para este jueves 29 de agosto a las 10:30 de la mañana, bajo la dirección del magistrado Antonio Serrano-Arnal, quien está reemplazando a la jueza habitual, Inmaculada Iglesias, durante sus vacaciones.

El ritmo del proceso judicial contra Nacho Cano se ha acelerado, con los jueces empeñados en obtener las declaraciones presenciales de los testigos, evitando así la opción telemática. La urgencia radica en que estos 17 estudiantes de actuación deben regresar a México, su país natal, el próximo domingo 1 de septiembre. Con esto, se pretende reunir el testimonio directo de los involucrados en la supuesta red de contratación ilegal de migrantes, un caso que llevó a la detención de Nacho Cano y otras dos personas el pasado 9 de julio.

Esta es la presunta trama de contratación irregular

El Juzgado de Madrid que lleva la investigación recibió una denuncia presentada por Lesly Guadalupe O.F., una de las bailarinas mexicanas que fue seleccionada para participar en el musical Malinche. Según el informe judicial, los acusados habrían facilitado la entrada de estudiantes extranjeros a España de manera irregular y con pleno conocimiento de lo que estaban haciendo.

La estrategia consistía en incluir a estos artistas en la nómina sin un contrato oficial, presentándolos como actores y bailarines “en formación”. Los estudiantes habrían ingresado al país con visas de turista, que solo permiten una estancia de hasta 90 días.

Para evitar ser detectados, la dirección de Malinche, compuesta por Cano y los otros acusados, supuestamente instruyó a los estudiantes para que no llevaran consigo “ningún material corporativo relacionado con la compañía Malinche ni nada que sugiriera que tenían la intención de quedarse en España”.

Los artistas comenzaron a llegar al país entre el 2 y el 10 de diciembre de 2023. En enero de 2024, los acusados habrían gestionado las solicitudes de “estancia por estudios” para los seleccionados, presuntamente de manera irregular.

Unos pagos irrisorios

Los estudiantes recibían una compensación económica insuficiente por su labor, “por debajo de lo estipulado en el convenio”, según el auto judicial. La empresa liderada por Nacho Cano, Malinche The Musical Spain S.L., habría estado “obteniendo beneficios a partir del trabajo de los seleccionados, quienes, después de un corto periodo de aprendizaje de canciones y coreografías, comenzaban a trabajar en el musical”, que se presentaba en IFEMA, en Madrid.