La delegación española logra 18 medallas en París 2024: mejor que en Tokio pero lejos de Barcelona

España logró en los Juegos Olímpicos 5 medallas de oro, 4 de plata y 9 de bronce, ubicándose en el 15º lugar de la tabla general. Repaso de las sorpresas, los triunfos lógicos y las desilusiones, con algunas sorpresas también.

La participación de España en los Juegos Olímpicos de París 2024 no logró igualar las icónicas 22 medallas obtenidas en Barcelona 1992. Aunque se aspiraba a superar ese hito, la delegación española concluyó su participación con un total de 18 medallas: cinco de oro, cuatro de plata y nueve de bronce.

Este resultado es una medalla más que en Tokio 2020 y convierte a París 2024 en la quinta cita olímpica más fructífera en la historia de España. Sin embargo, considerando las altas expectativas generadas por un ciclo olímpico sobresaliente y la ausencia de competidores fuertes como Rusia, el resultado no puede considerarse completamente satisfactorio.

Dentro de lo esperable

El desempeño de España en París 2024 sigue dentro de los parámetros habituales de las últimas citas olímpicas. Desde Atenas 2004, la delegación española ha oscilado entre 17 y 20 medallas en cada edición de los Juegos. Lo positivo de París 2024 es que se lograron cinco medallas de oro, empatando con Atlanta 1996 y Pekín 2008 como la tercera mejor marca histórica de España, detrás de las 13 medallas de oro obtenidas en Barcelona 1992 y las siete en Río 2016.

Estos JJOO han dejado imágenes icónicas para el deporte español, desde la celebración del gol de Sergio Camello en el último instante de la prórroga contra Francia, hasta el emotivo abrazo entre María Pérez y Álvaro Martín tras ganar el relevo mixto. También serán recordadas las lágrimas de Carlos Alcaraz después de perder la final ante Novak Djokovic, lo que pudo ser el último adiós de Rafa Nadal en Roland Garros, y la angustia de Carolina Marín tras romperse el ligamento cruzado cuando tenía casi asegurado su lugar en la final olímpica.

Deportes que siempre están en la discusión

En cuanto a los deportes que tradicionalmente han aportado medallas a España, la vela y el piragüismo no fallaron en esta edición. Desde Marsella, Diego Botín y Florian Trittel lograron el primer oro para España en la clase 49er, mientras que en Vaires-sur-Marne, Pau Echaniz se llevó el bronce en K1 eslalon, Joan Antoni Moreno y Diego Domínguez hicieron lo propio en C2 200, y Saúl Craviotto, Marcus Cooper, Carlos Arévalo y Rodrigo Germade ganaron el bronce en K4 500. Craviotto, con esta medalla, se convirtió en el deportista español más laureado en la historia olímpica, con seis preseas.

La marcha también cumplió con su tradición, aportando una medalla de cada color. Álvaro Martín consiguió el bronce, María Pérez la plata, y juntos conquistaron el oro en el relevo mixto. En atletismo, Jordan Díaz ganó el oro en triple salto, completando así una destacada actuación del equipo español, aunque Ana Peleteiro, quien se esperaba que subiera al podio en el Stade de France, no logró hacerlo.

El tenis también contribuyó al medallero español con dos preseas: la plata de Carlos Alcaraz en individuales y el bronce de Cristina Busca y Sara Sorribes en dobles femeninos. Sin embargo, el esperado dúo de Alcaraz y Nadal en dobles masculinos no logró alcanzar una medalla, lo que dejó un sabor agridulce en el equipo español.

Los deportes de equipo

España también destacó en deportes de equipo, presentando su máxima representación histórica. Después de 28 años sin un equipo campeón olímpico desde el waterpolo masculino en Atlanta 1996, España se va de París con dos títulos: en fútbol masculino, que consiguió su segundo oro tras el de Barcelona 1992, y en waterpolo femenino, que logró su primer oro olímpico tras caer en las finales de Londres 2012 y Tokio 2020.

Además, el equipo de baloncesto 3x3 femenino ganó una inesperada medalla de plata, y la natación artística recuperó la senda del éxito con un bronce en la competición por equipos.

Las decepciones

No obstante, no todo fue positivo para España en estos Juegos. La mayor decepción la protagonizó la selección femenina de fútbol, que, tras un año en el que fueron campeonas del mundo y de la Nations League, no pudo pasar del cuarto puesto en París.

Jon Rahm en golf y la pareja de Nora Brugmann y Jordi Xammar en vela también estuvieron por debajo de las expectativas, al igual que el equipo de taekwondo, que llegó con aspiraciones, pero se fue sin medallas. El judo, aunque aportó un bronce con Fran Garrigós, no encontró la continuidad deseada, y otros atletas como Ana Peleteiro y Hugo González no alcanzaron los resultados esperados.

Finalmente, algunas sorpresas agradables surgieron en París 2024, como el bronce inesperado de Pau Echániz en K1 eslalon y la plata del equipo de baloncesto 3x3 femenino. El boxeo, un deporte que había estado aletargado en las últimas ediciones, sorprendió con la plata de Ayoub Ghadfa en superpesados y el bronce de Enmanuel Reyes Pla en la categoría de -92 kilos.