Monjas Clarisas de Belorado: ¿Por qué se revelaron contra la Iglesia Católica? Así rompieron con el Vaticano

La controversia de estas monjas ha provocado un sin fin de reacciones en medios y redes sociales, dónde se cuestiona sobre el futuro de estas religiosas.

Por:

Julia Castro

Unas monjas clarisas abandonaron la Iglesia católica para seguir a un controvertido personaje que fue excomulgado, en un caso con una amplia repercusión dentro y fuera de España. Las religiosas se declaran sedevacantistas, es decir que no reconocen la autoridad del Vaticano, por lo ahora están en conventos en Belorado y Orduña, dos localidades del norte del país.

Las religiosas se unirán a la Pía Unión Sancti Pauli Apostoli, que considera último papa legítimo a Pío XII, fallecido en 1958, lo que para muchos es una secta fundada por Pablo de Rojas Sánchez-Franco, excomulgado en 2019.

Mario Iceta, arzobispo de Burgos, diócesis a la que pertenece Belorado, fue quien decretó su excomunión y quien ha comunicado a la Santa Sede la decisión de estas 16 religiosas de abandonar la Iglesia.

Además de las diferencias en las creencias, existe un conflicto por la venta de un convento de estas monjas conocidas por la elaboración de sus chocolates. Fue en una extensa declaración de 70 páginas firmada por su abadesa sor Isabel de la Trinidad se acusa de herejía a los papas posteriores.

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Las clarisas buscan vender un convento vacío para poder comprar el monasterio de Orduña a la propia Iglesia, quien rechazó la operación ante el temor de que detrás estuviera un comprador como el fundador de la Pía Unión y el caso acabó en los tribunales al reclamar las monjas cerca de 1.6 millones de euros por unas supuestas obras realizadas.

“Nos van a denominar herejes y cismáticas, locas y muchas cosas más, muy calumniosas y desagradables. No los creáis, al menos por esta vez, que no os engañen”, y añadió que las propiedades deben ser “muy golosas” para algunos, denuncia esa declaración sobre lo que considera una persecución a comunidades “de línea tradicional” para quedarse con sus bienes: “Dios nos libre de los lobos con piel de oveja”, afirman.

En tanto, el monasterio mantiene cerrados los espacios que habitualmente estaban abiertos al público, como la iglesia y el despacho del obrador, famoso por su repostería. Estos hechos han generado gran sorpresa en las redes sociales, donde las clarisas afirman que no están secuestradas y los usuarios afirman que las religiosas llegaron a festivales gastronómicos y grandes superficies comerciales, fue por el dinero y no por la fe.

La Orden de Santa Clara o de las Hermanas Pobres de Santa Clara fue fundada por san Francisco y santa Clara de Asís en 1212 y desde el siglo XVI se extendió también por América.